Como niños

Somos como niños. Y a veces, entramos en una tienda de ropa y derramamos sin querer un vaso de cafe con leche...


Paseaba yo por la web de mis amigos de Ultraplayback donde he visto que el Capitán Minifalda nos dice que está leyendo el libro "Diario (1953-1969)" de Witold Gombrowicz.

No cuenta que en él , el autor hace una reflexión sobre el hecho de dejar de ser niño y nos muestra el siguiente párrafo:

“¿Cómo puedo querer que no sean niños, si yo mismo, per fas et nefas, quiero ser un niño? ¿Un niño?, sí, pero un niño que ha alcanzado todas las posibilidades de la seriedad adulta y las ha experimentado. En esto radica toda la diferencia. […] sólo entonces, cuando el abismo que no habrás logrado dominar te arroje de la silla, siéntate en el suelo y descubre de nuevo la hierba y la arena. Para que la infancia llegue a ser lícita, hay que llevar a la madurez a la bancarrota. Bromas aparte, cuando pronuncio la palabra ‘infancia’, tengo la sensación de expresar el contenido más profundo y todavía adormecido de la nación que me ha engendrado. Pero no es la infancia de un niño, sino la difícil infancia de un adulto.”

Y como muy bien dice el Capitán Minifalda: "No hay que seguir pistas falsas para ser adultos, de esas que nos hagan abandonar la infancia definitivamente (muerte). Ni tampoco caer en el error de evitar la adultez (inmadurez). Gombrowicz lo dice claro. Hay niños y niños."

[Foto después de haber limpiado el cafe-con-todo del Starbucks que se tomaba Ladynikto (www.fotolog.com/ladynikto) ]