Das Glück (la suerte)

Hay veces que la vida te sonríe. Mucha gente no sabe valorarlo porque la suerte va y viene en sus vidas cual vuelo elíptico del boomerang siguiendo el principio de Bernoulli, pero a otros, en cambio, la suerte se les aparece en muy contadas ocasiones.

Son momentos, instantes, en los que sientes por un breve espacio de tiempo que flotas sobre la realidad, que las cosas empiezan a caer bien y tu ser se empieza a sentir mejor. No es sólo alegría, no es sólo amor, no es sólo felicidad, no es sólo ilusión, no es sólo amistad, no es sólo sentimiento, no es sólo diversión, no es sólo plenitud, no es sólo fortuna... Más bien es un cúmulo de todo ello, un saco lleno de conceptos que hace de tu vida algo más maduro y coherente, más completo.

Haciendo acopio de las palabras de mala_malita, diré que:

unos meses
cuantas cosas pueden cambiar en solo unos meses?
las últimas semanas
este ha sido un tema recurrente
hablando con gente
personas nuevas en mi vida
otras reaparecen
pienso cosas nuevas
siento cosas nuevas
nuevos planes

definitivamente los tiempos han cambiado

Pero eso no es el fruto de unos días, no es una sensación buscada a propósito, no es algo engendrado por uno mismo. El tiempo ha decidido que sea ahora cuando encontremos la suerte en nuestro camino. Lo que aprendimos del pasado y lo que nos está enseñando el presente, lo viejo y lo nuevo, lo que despareció y lo que permanece. El tiempo ha decidido que una mezcla de personas, sentimientos y actitudes, confluyan en el mismo punto haciendo maravilloso algo tan simple como la vida cotidiana. Quizás haya habido otros momentos de suerte en este camino, pero ahora la suerte nos sonríe y no podemos hacer otra cosa que aprovecharlo.

Mucha suerte para todos, para todos. También en especial para vosotros dos, porque cada día el futuro está haciendo más solido vuestro camino. Y también, en especial para ti, porque te guardo un poquito de mi suerte para cuando vuelvas, o para cuando vaya ;)

FOTO: Tenia ganas , muchas ganas de poner esta foto que hice en una calurosa y soleada tarde del verano del 2004 en los jardines de Versailles.