Ya hace días que oigo esta frase, y una de las personas a las que he oído pronunciarla me ha insistido en ello. Por eso este post.En la vida hay temporadas para todo, como para la fruta y las lluvias. Hay temporadas de muchas ranas y temporadas de pocas ranas. Eso no quiere decir que a mayor número de ranas encontradas mayor número de ranas besadas.
No se porqué, pero esto me recuerda a las tapas de los yogures cuando eramos pequeños: si no las abrías no podías saber que encontrarías debajo. Tu siempre buscabas un premio, unos cromos, un juguete, pero la mayor parte de ellas te saludaban con un sutil 'Sigue buscando'.
Lo cierto es que hace falta confianza para besar una rana. De hecho, últimamente más bien me dan asco y cada vez me cuesta más acercarme a ellas para besarlas.
Así que... paso del tema... Supongo que un dia tropezaré y, sin tiempo para reaccionar, caeré de bruces en el suelo besando de pleno a esa rana que se convertirá en mi tan ansiada princesa azul, supongo. Todo supongo. Como siempre.
El azar es así... puedes ir besando ranas , todas las que quieras, pero la tuya aparecerá el dia que en la tapa del yogur no se pueda leer un sigue buscando.
P.S.: La rana verde, el principe azul, la caperucita roja, la cometa blanca, el tulipán negro y el tractor amarillo... ¿Curiosa Infancia, no?
FOTO: Fuente (Font del Gat , Barcelona - Abril 2005)
1 comentario:
Tal vez el problema son las versiones de los cuentos que nos han llegado. Cenicienta las pasó canutas después de casarse con el príncipe...
Pedimos imposibles!!
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