22 octubre 2005

Si vives de tus sueños corres el peligro de no despertar

Hoy desperté, no era un sueño esta vez.

Desperté y no encontré tu sonrisa. No he soñado con ella, ni siquiera he soñado contigo. Pero al abrir los ojos pensé en ello. Y es que me cautivó, para que engañarme a mi mismo. Quizás tuve bastante por ayer, quizás no. Quién sabe. Lo que está claro es que esa sobredosis de luz no me ha dejado indiferente.

Te habría dicho mil frases inoportunas y no lo hice. Te habría hecho muchas proposiciones y preferí dedicar la noche a disfrutar del momento. Te habría explicado mi vida y preferí vivirla contigo.

Cuantas cosas te habría dicho y no te dije. Ya sé que algunos mienten que soy poeta y que para mí es sencillo, pero no es tan sencillo decir las cosas en su momento.

Cosas simples, que hoy he aprendido a guardar. He aprendido a observar ¿Un café quizás? He aprendido a querer conocerte ¿O tal vez un paseo? He aprendido a saber dónde quiero llegar ¿Una charla tranquila en la playa? Conocerme, Conocerte, Conocernos. Tan simple.

La puerta está abierta.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Poeta es actitud frente a la vida.

Sliding doors